Este año el programa El gordo y la flaca (Univision) estará cumpliendo 25 años al aire como uno de los shows más vistos y populares de la televisión de habla hispana.
Parte de su indiscutible éxito ha sido la química que derrochan en pantalla cada tarde sus carismáticos conductores, Lili Estefan y Raúl de Molina, quienes conforman una de las parejas televisivas más queridas por el público.
Y es que si algo ha caracterizado al conductor cubano desde sus inicios es la transparencia con la que siempre ha hablado al público. “Y por eso me meto en problemas”, reconocía recientemente entre risas.
No fue la excepción a la hora de hablar de la notable disminución de peso que ha experimentado en los últimos meses. El conductor ha perdido cerca de 38 libras.
“A mí no me gusta engañar a nadie”, dejó claro frente a las cámaras de El gordo y la flaca. “Yo no soy como las mujeres aquí que salen y dicen ‘perdí 50 libras, lo hice a dieta”.
Con la sinceridad que siempre lo ha caracterizado, De Molina reveló que está siguiendo una “medicina que se llama Mounjaro”. “No me la está regalando nadie, la tengo que pagar”.
El presentador explicó que “es una medicina que te inyectas una vez a la semana” y con la que ya ha conseguido perder “cerca de 38 libras”.
“He perdido ya cerca de 38 libras”, compartió De Molina, “pero no puedes comer de más porque después te cae mal, ni puedes comer nada que sea grasoso”.